En el anteúltimo partido por la fase de grupos de la Copa Libertadores, Boca empató contra el conjunto Brasileño y ahora debe esperar al jueves para conocer su posición en la zona E. Los tantos del encuentro los convirtieron, Du Queiroz del lado de los visitantes y Darío Benedetto para el Xeneize. Los locales hicieron méritos para quedarse con la victoria.
A los 16 minutos de la primera parte, el Timao, que esperaba detrás de la mitad de cancha y expectante por una contra, consiguió un tiro de esquina y se encontró con el 1-0 de rebote. Sin embargo, a menos de tres minutos para el complemento, Zambrano bajó una pelota de cabeza en el área rival y el Pipa con un remate cruzado igualó las cosas.
Pasado el entretiempo, Boca salió con la misma o mayor intensidad de los vestuarios, para lograr una diferencia. El equipo de Sebastián Battaglia fue agresivo, intenso, pero también impreciso cerca del arco de Cassio. Por su parte, los de San Pablo se mostraron temerosos y debieron recurrir a las infracciones y las peleas para no quedarse sin su punto.
El recurso se le fue de las manos a Cantillo, que vio la tarjeta roja por agredir a Romero. A pesar de la correcta intervención, el árbitro Christian Ferreyra no pareció tener una buena noche. El encargado de impartir justicia repartió amarillas a gusto y además se quedó corto en el tiempo agregado. Un hecho que hizo enfadar al cuerpo técnico de la Ribera.
En una gran actuación en todas sus líneas, el equipo de Brandsen 805 sufrió la falta de lectura en el arranque y a pesar de haber empatado el primer encuentro en lo que va de la temporada, el resultado tuvo un sabor amargo. Desde lo futbolístico el Xeneize volvió a dar otra gran muestra de carácter, que permite ilusionarse. Veremos si esto queda plasmado el domingo en el Estadio Mario Alberto Kempes, cuando enfrente a Tigre por la final del torneo local.
