Hoy desde las 21:10, Boca jugará la final de la Copa Argentina ante Talleres. Es un duelo clave para saber si el xeneize disputa directamente la fase de grupos de la Libertadores o si se la juega el fin de semana. En ese sentido, Juan Román Riquelme llegó a Santiago del Estero, para estar junto al plantel y el consejo de fútbol. Lo hizo acompañado del presidente, Jorge Amor Ameal.
Desde que Boca jugó con River por los octavos de final en La Plata, la presencia del vicepresidente se hizo una constante en cada cruce del certamen. No es así cuando juega de visitante por la Liga Profesional, donde mayormente el mandatario boquense no asistió. Recordemos que en semifinales el xeneize venció 1-0 a Argentinos en Mendoza, y también hubo furor por la llegada del ídolo.
El vicepresidente está teniendo una participación muy activa, cuando antes prácticamente no dialogaba con nadie. En este segundo semestre salió en demasía y eso trajo algunos rumores de una posible pelea con Sebastián Battaglia. Se sabe que el mundo Boca no es sencillo, por lo que la actual dirigencia mediante el consejo de fútbol, quiere alivianar eso, aunque a veces tiene efecto contrario.
El encuentro de hoy puede definir el futuro del actual cuerpo técnico. El consejo de fútbol ya ha mostrado interés en algunos jugadores para reforzar el plantel. Paolo Guerrero, Christian Cueva y Pedro Gallese, algunos de los nombres que sonaron para el 2022. Si consigue clasificar a la Libertadores quiere tener un plantel competitivo.
En teoría, Battaglia seguiría al mando del primer equipo. La idea es traerle refuerzos que potencien a la base que ya tiene. Además, habrá alguna que otra baja y le van a dar la posibilidad de poder armar su equipo. También hay muchos jugadores que volverán de sus préstamos y tendrán que definir quiénes se quedan y los que serán cedidos nuevamente.
