Un 18 de diciembre pero del 2005, Boca conseguía levantar su segunda Copa Sudamericana. El Xeneize y Pumas disputaron el título, el cual se tuvo que definir en penales. Más allá de que el equipo de Alfio Basile era el candidato y el favorito a quedarse con el titulo, el equipo mexicano luchó hasta el final y todo se decidió desde los doce pasos.
Aquel partido Boca jugó el primer tiempo con autoridad pero se complicó en el segundo, permitiendo que Pumas llegara al 1-1, lo cual daba lugar a una definición por penales, que volvió a quedar en manos de los Xeneizes tras imponerse 4-3. Un nuevo titulo internacional para el club y que La Bombonera estalle con una fiesta a la que ya estamos acostumbrados.
Roberto Abbondanzieri se convertiría en el héroe de la noche, cuando hubo que ponerle pecho a una complicada definición por penales en La Bombonera. El arquero, que había conquistado en ese momento su título número 13, atajó dos penales, uno de ellos de manera brillante, y se encargó de convertir el que llevó al Xeneize a la gloria.
En la definición por penales, para Boca convirtieron Federico Insúa, Rolando Schiavi, Marcelo Delgado y Abbondanzieri, mientras que Sergio Bernal le atajó el envío a Guillermo Barros Schelotto y el remate de Martín Palermo dio en el travesaño. Pero el “Pato” salvó a sus compañeros, convirtiéndose en la figura de esa tanda.
De esta manera, con la obtención de este título, los del Coco Basile alcanzaban en la conquista de torneos internacionales a Independiente, el Real Madrid de España y el Milan de Italia, todos con quince campeonatos. Aquella resultaba una semana perfecta para Boca, ya que unos cuatro días antes, se coronaba campeón del torneo Apertura.