Jorge Comas, exjugador de Boca Juniors y goleador en los años 80, se encuentra desde hace unos años radicado en México y estará dos años en prisión preventiva acusado de violencia de género hacia las vecinas del barrio donde vive. Fue detenido por agresiones y luego condenado por la Fiscalía General del Estado de Veracruz ya que golpeó a los policías que lo arrestaron.
El juicio por la violencia ejercida sobre tres vecinas acontecido el 4 de junio aún resta definirse. Sin embargo, una de las denunciantes explicó lo sucedido en una entrevista con Imagen Noticias: “Me avienta un vaso de cristal con cerveza, logro esquivarlo, se estrella el vaso y se me viene encima a los golpes. Yo veía la rabia en su cara pero yo no sabía por qué. Yo traía mis lentes puestos, me los desbarató en la cara y me siguió golpeando”.
Alejado del fútbol, Comas ya se había visto involucrado en situaciones de este estilo. En 2012 fue detenido por presunta agresión y amenazas a un periodista y también vinculado a la violencia, en 2016 fue arrestado por agredir a una persona dentro de un restaurante de la ciudad de México.
La trayectoria de Jorge Comas
Previo a llegar a Boca fue jugador de Colón y Vélez. Pero fue en el conjunto de La Ribera donde brilló coronándose goleador de tres campeonatos. Durante su paso por el “Xeneize”, entre 1985 y 1989, disputó 127 partidos y convirtió 63 goles. Luego se fue entre 1989 y 1994 a Tiburones Rojos de Veracruz (México) para después retornar a la Argentina y jugar en Colón de Santa Fe.
En Veracruz, se transformó en goleador de la temporada 89/90 y consecutivamente se convirtió en uno de los máximos ídolos de la historia de la institución. Sin embargo, esa imagen de futbolista querido y exitoso tiene una diferencia abismal con la situación que atraviesa actualmente.