Boca tiene dos caminos para entrar a la próxima edición de la Libertadores. Uno de ellos es ganar la Copa Argentina o terminar entre los tres mejores de la tabla anual del torneo local. Con la derrota de ayer de Lanús ante Patronato, el Xeneize cuenta con la posibilidad de ampliar la ventaja y seguir ocupando un cupo en los puestos altos e ingresar a la Copa.
Teniendo en cuenta que Colón, que es campeón de la Copa de la Liga Profesional y de que River o Talleres, probablemente, alguno de ellos será campeón del actual torneo van a liberar una plaza, hoy por hoy el Xeneize se estaría clasificando en la tercera posición y depende del equipo de Sebastián Battaglia defender ese puesto pesado.
El equipo azul y oro recibe a Sarmiento el próximo sabado por la tarde en la Bombonera, un encuentro clave para el conjunto de Battaglia, que de ganar le sacaría 4 puntos de ventaja a su principal perseguidor y la oportunidad de jugar el certamen internacional más importante del continente estaría casi asegurado, salvo una catástrofe.
Con dos cambios y todavía una duda, el 11 que se perfila para salir al campo de juego con un estadio lleno después de dos años de pandemia seria: Agustín Rossi; Advíncula o Mancuso, Carlos Izquierdoz, Marcos Rojo, Frank Fabra; Agustín Almendra, Jorman Campuzano, Juan Ramírez; Edwin Cardona; Sebastián Villa y Luis Vázquez.
Por otra parte, la vía principal que hoy en día tiene Boca para meterse en la Copa Libertadores es la Copa Argentina, en la que espera en la final al ganador del duelo que protagonizarán Talleres de Córdoba y Godoy Cruz. El equipo azul y oro apunta todos los cañones a dar la vuelta en esta competencia para así garantizarse el boleto directo.