Mañana se jugará la vuelta de los octavos de final. Un partido clave para el futuro Xeneize, donde una victoria puede dejarlo bien parado de cara a los próximos desafíos del semestre (en agosto juega octavos de Copa Argentina vs. River) y una derrota puede dejar tambaleando a Miguel Ángel Russo. Por eso, la siguiente estadística preocupa al DT.
El encuentro se disputará en el estadio Mineirão, en el cual Atlético ganó todos sus partidos de la presente Copa Libertadores. Allí, anotó diez tantos y recibió solamente uno en contra. Además, hasta 2019, había disputado 40 partidos del torneo continental en su casa y solo cayó en dos oportunidades. Es decir, una estadística que data desde hace varios años.
En esta línea, por el torneo local también se hace fuerte. Ganó en tres oportunidades, empato otra y perdió la restante (en la primera fecha del torneo). Los números son muy favorables para los brasileños, pero Russo sabe que las estadísticas se hicieron para romperse. Un gol Xeneize obliga a Mineiro a anotar dos tantos. Difícil pero para nada imposible.
Escándalo en Atlético Mineiro
Se compartieron videos de Guga, lateral del equipo brasileño, en una fiesta clandestina. La situación generó mucho revuelo, porque el jugador rompió la burbuja deportiva y deberá hacer una cuarentena estricta. De esta manera, se perderá el encuentro ante Boca. Sin embargo, no es titular, pero sí una pieza clave en el armado del plantel.
A esta baja, se le suma la de Eduardo Vargas por COVID-19. El chileno, figura de la Copa América, se perderá el partido y, pese a tampoco ser titular, si suele ser el primer o segundo cambio de Cuca, especialmente cuando el partido está complicado. Una perdida sensible. Todavía estamos a la espera de los resultados de los hisopados del resto de los jugadores.