Cuando parecía que Boca tenía cerrada una nueva incorporación, se dilató la llegada de Luis Advíncula al país. Se esperaba que el peruano arribase a la Argentina esta mañana, pero finalmente no se tomó el vuelo y se entrenó con Rayo Vallecano. Ante esto, surgieron varias suspicacias acerca de la negociación. Algunos creen que el pase se cayó, mientras otros piensan que igualmente se realizará. ¿Qué pasó realmente?
La semana pasada, la información que primaba era que restaban detalles para que Advíncula sea jugador Xeneize. El Rayo Vallecano había aceptado las condiciones de contrato y solo restaba arreglar el contrato del jugador. Se estimaba que esto último sería lo más sencillo pero, a día domingo, aún no pudieron ponerse de acuerdo ninguna de las dos partes, y el peruano continúa en España.
Los rumores marcan que Boca estaría esperando el resultado del próximo martes. Si el equipo de Russo logra la clasificación a octavos de final, los dirigentes acelerarían la contratación de Advíncula para tenerlo para los cuartos de final. Pero, si queda eliminado, el Consejo de Fútbol no se desesperaría por traerlo, teniendo en cuenta que habrá un calendario mas alivianado.
Con la presencia de Weigandt, más algún juvenil de la reserva, el puesto estaría cubierto. Sin embargo, la oferta no se retiraría, sino que no le cumplirían las exigencias a Advíncula por dejar de ser prioridad. Es decir, le ofrecerían un contrato más accesible para la economía xeneize. Algo que al experimentado lateral, seguramente, no le haría nada de gracia.
De momento, las charlas están en stand by. El peruano entrenó con el Rayo Vallecano, pero no fue parte del amistoso de esta tarde ante el Real Madrid. Las intenciones de venderlo, por parte de los españoles, están. Pero Riquelme y compañía aguardarán por un resultado positivo del martes para enriquecer el contrato de Advíncula. ¿Te parece buena estrategia?