Boca tuvo hoy el último entrenamiento de cara al partido del domingo ante Rosario Central en la Copa Liga Profesional, con una buena noticia para Sebastián Battaglia. Salvo Marcelo Weigandt y Norberto Briasco que se están recuperando de sus respectivas lesiones, el entrenador cuenta con todo el plantel a disposición y, además, sumó una cara nueva.
A primera hora de este sábado, Óscar Romero se vistió con la indumentaria xeneize y ya trabajó junto a sus nuevos compañeros en el complejo Pedro Pompilio. Si bien no estará disponible para el choque con Central de este domingo, la práctica matutina le servirá para ponerse a punto desde lo físico y futbolístico, y empezar a ser parte del grupo.
El volante viene de tener participación con la Selección paraguaya en la doble fecha de Eliminatorias de noviembre del 2021. El futbolista ingresó en el segundo tiempo ante Colombia, pero no juega partidos oficiales con clubes desde agosto del año pasado. Allí vistió la camiseta de San Lorenzo por el torneo local ante Argentinos Juniors.
¿Por qué no fue la primera vez de Oscar en el predio?
“Tuvimos la oportunidad de venir a Boca en 2007, el año que Boca salió campeón de la Libertadores. Estuvimos en Casa Amarilla viviendo un tiempo largo. Hoy se me da a mí la oportunidad de volver después de muchos años. Uno no perdía la esperanza de volver, entrar a la Bombonera y darle alegría a la gente”, comentó el propio jugador en su presentación.
Además, admitió que Riquelme es su ídolo desde chiquito y que se encandiló al verlo de cerca en aquella época. “Como comenté, en el 2007 era chiquito. Estaba en Casa Amarilla y veía que entrenaban. Román fue un espejo para mí, ser como él. Recibir esa llamada de parte de él… para mí es un privilegio. Estoy muy feliz”, agregó.
