Un 7 de diciembre, pero del 2014, Juan Román Riquelme, jugaba su último partido como futbolista profesional. Lamentablemente, no fue como todo el mundo quería que fuera, con la camiseta de Boca. Le toco hacerlo con la de Argentinos Juniors, que estaba en la B nacional, y el diez disputó su ultimo cotejo con la noticia de haber conseguido el ascenso a la Primera División.
Una de las grandes leyendas del fútbol argentino colgó los botines luego de devolverle a Argentinos un poco de lo que le había brindado en su formación futbolística. Y así lo reconoció luego del cotejo: “He tenido la suerte de devolverle a Argentinos todo lo que me dio de chico. Creo que ahora estamos a mano”, sentenció el diez.
Riquelme salió reemplazado a 30 segundos del final y recibió una merecida ovación de la hinchada, que coreó su nombre mientras estaba cruzando la línea de cal por última vez como futbolista. La gente ya sabía que era la última vez que iban a ver al 10 con la camiseta del Bicho , que en esa semana había anunciado que si conseguían el ascenso, abandonaría el club.
Meses más tarde, aclaró por qué no seguía en el equipo que lo formó: “En Argentina no puedo usar otra camiseta que no sea la de Boca en Primera División“. Tan sólo jugó seis meses en Argentinos, donde dejó un recuerdo imborrable para los fanáticos. En la B Nacional, disputó 15 partidos completos y ayudó al equipo a conseguir el tan buscado ascenso.
A lo largo de su carrera, deslumbró con su magia en 4 clubes: Boca, Barcelona, Villarreal y Argentinos, además de la Selección Argentina. Sin embargo, está completamente identificado con el elenco Xeneize. Boca es sinónimo de Riquelme y viceversa: allí, disputó 14 temporadas en diferentes etapas, en las que convirtió 92 goles y entregó 153 asistencias.