El fin de semana, Marcos Rojo aprovechó que Boca no disputaba partidos oficiales como consecuencia de la FECHA FIFA de junio para jugar un encuentro amateur e ir a un boliche. Ante esta situación, desde el Xeneize se refirieron a las imágenes que comprometen al capitán, que viene de ser expulsado en la derrota 1-0 como visitante ante Platense por la 4° fecha de la Liga Profesional, se hicieron virales en las redes sociales.
El zaguero central de 34 años se entrenó bajo las órdenes de Diego Martínez en la mañana del sábado, pero por la tarde comenzó a circular una foto suya junto al usuario de Instagram @juanpvzz tras un partido de fútbol amateur de un intercountry. “Jugar de doble 5 con este muchacho no tiene precio”, posteó.
Como si esto fuera poco, esa misma noche, comenzó a circular otra foto del defensor en Bye Henry, un boliche ubicado en la Ciudad de La Plata, junto a una fanática. “Tenían el día libre”, manifestaron desde Boca Predio (Ezeiza). Es que el Xeneize se entrenó por última vez el sábado y regresó a los entrenamientos recién el lunes después de haber tenido un domingo libre.
El viernes el equipo azul y oro se enfrentará a Vélez por la quinta fecha de la Liga Profesional 2024 en La Bombonera. Para este encuentro, el anteúltimo de Boca en el cierre del primer semestre, el defensor deberá cumplir con la sanción por ver la tarjeta roja. La buena noticia para Martínez es que Aaron Anselmino hoy se sumó a las prácticas junto al resto de sus compañeros después de resentirse de un desgarro en el isquiotibial izquierdo que lo tuvo un largo tiempo afuera y en la semana se esperan novedades por Nicolás Figal (desgarro en el gemelo de su pierna izquierda).
La opinión de Riquelme sobre los picados
En febrero de 2022, luego de que Rojo también protagonizara un picado bajo la lluvia junto a Agustín Almendra y Gastón Ávila, ambos por entonces en el club, el actual presidente Juan Román Riquelme comentó: “Hemos ganado el torneo argentino del 98, 99 y cuando jugamos la primera Libertadores en el 2000, yo jugaba la Copa, no el domingo, y me iba a jugar los torneos de plata con mis amigos. Me lastimaba los tobillos, llegaba el lunes y Bianchi me preguntaba cómo estaba. Bianchi sabía todo, nunca le mentí”.
En la misma línea, el entonces vice de Boca agregó: “Voy a morir siendo futbolista, sin dudas. A mí no me cambia si quieren jugar un picado con los amigos, quiero que disfruten el club. Hay que cuidarse, respetar a los hinchas, pero de vez en cuando jugar un picado con los amigos no hace mal a nadie. Los amigos son lo más grande que hay y hay que cuidarlos mucho”.