Como en los viejos tiempos, cuando llegar temprano a la cancha significaba ver el partido de los juveniles un rato antes de que comience el estelar de Primera, los hinchas volvieron a seguir de cerca a la Reserva de Boca. La de Hugo Ibarra y Mauricio Serna. La que no para de cosechar buenos resultados en el torneo y se ilusiona con ser campeona.
Tiempo, eso es lo que dice Ibarra que les falta a los pibes. Mientras tanto, su equipo lleva 15 partidos invicto con 11 victorias y cuatro empates, 44 goles a favor, un promedio de casi 3 goles por partido, y sólo 11 en contra. A todo esto, se le suma la heroica remontada desde los últimos puestos de la tabla hasta la cima hasta sacarse cuatro puntos de diferencia a sus escoltas, Estudiantes y Argentinos.
Al igual que la Primera, la Reserva de Boca también comenzó el torneo con el pie izquierdo, en ese entonces Sebastián Battaglia era el director técnico de la tercera y fue mejorando su cosecha con el correr de los partidos, luego de haber llegado a la final en el torneo anterior, donde lamentablemente fue derrotado por 2-1 ante Sarmiento.
“A mí me gusta jugar en este equipo porque siempre buscamos ser protagonistas y no importa si vamos ganando, queremos hacer siempre uno más“, contó Valentín Barco, sobre el andar de la Reserva del Negro. El joven lateral izquierdo de 17 años que ya debutó en Primera, una de las joyas surgidas del club y uno de los jugadores más queridos por los hinchas.
“Ibarra y Battaglia siempre nos piden lo mismo, mucha intensidad a la hora de presionar, jugar mucho, tener la pelota, cuidarla y atacar. Yo creo que la virtud de este equipo es que está muy consolidado, que va a presionar ante la pérdida, cuidar la pelota y jugar mucho”, explicó Pedro Velurtas, lateral derecho que firmó contrato con el club, hace unos días.