Durante su etapa como vicepresidente del fútbol profesional, Juan Román Riquelme ha buscado innumerable cantidad de jugadores que pueden llegar a vestir la camiseta de Boca. Dentro de esos nombres aparece Roger Martínez. Pero su llegada a la institución puede darse por una sola situación. Solamente si Boca vende a Sebastián Villa.
¿Por qué se da esta cuestión? En primer lugar Boca tiene el cupo de extranjeros bastante complicado. En segundo lugar, América de México pretende una cifra sumamente importante por los servicios del delantero. Sin embargo, todavía no se ha dado ninguna venta para poder buscar al atacante. Aunque sigue siendo uno de los sueños de Riquelme.
Hace algunas semanas, mediante su representante el delantero comunicó que no volverá a entrenar en el club mexicano. También esta su deseo de jugar en Boca. Pero a esa cuestión personal, hay que sumarle el factor económico. En este aspecto, el club xeneize todavía no puede competir dado que no tiene un gran ingreso por venta de futbolistas.
En el caso de que Pavón y Villa sean vendidos, el club está decidido a ir a la carga por al menos un reemplazante natural. Más allá de los jugadores jóvenes que tenga la institución en esos puestos, para competir en la copa Libertadores buscarán la jerarquía necesaria. En este caso, el nombre de Roger Martínez encaja en ese perfil que se busca en los mercados de pases.
Aún es muy pronto para dar una sentencia sobre esta cuestión. Como sucede en toda negociación, nada se logra de la noche a la mañana. Además negociar con los clubes del exterior es bastante complejo. Pese a que la realidad económica de nuestro país está lejos de ser la ideal, Boca lucha por el sueño de traer a futbolistas de jerarquía.