Un día como hoy, pero hace diez años, Martín Palermo se retiraba del fútbol profesional. El máximo goleador en la historia de Boca disputó su último partido con la camiseta azul y oro. Y lo hizo en una tarde épica y recordada por todo el fútbol argentino. El “Xeneize” visitaba La Plata para enfrentar a Gimnasia y Esgrima, donde jugaba Guillermo Barros Schelotto. En ese momento, el “Lobo” peleaba el descenso. Por eso, ese día se jugaron ¡cinco partidos en simultáneo!
Gimnasia-Boca, River-Lanús, Quilmes-Olimpo, Independiente-Huracán y Argentinos-Tigre definían los puestos de descenso. Además, Boca peleaba el ingreso a la Copa Sudamericana de ese año. En ese contexto, Martín se despedía del fútbol. El partido fue chato. Gimnasia si ganaba jugaba la promoción, mientras que si perdía podía descender. Se puso en ventaja el “Lobo” platense rápidamente en el primer tiempo.
A los 12 minutos, ya ganaba 2 a 0 con goles de Graf y Guillermo, de penal (lo gritó como nunca). El partido, se hacía cuesta arriba y Palermo no había tenido ocasiones de gol. Los oídos de toda la hinchada de Boca que se acercó hasta La Plata -todavía había hinchas visitantes en las canchas- estaba puesta en el partido de River ante Lanús y en el de Quilmes con Olimpo. Esos dos encuentros definían si el “Millonario” jugaba la Promoción.
A la media hora de partido, llegó un centro de Mouche para que Christian Cellay descuente y le ponga emoción al partido. Boca se desesperaba buscando la victoria. Sobre el final del partido, en el tercer minuto de descuento, lo que parecía derrota segura empezó a cambiar. Desde el botín derecho de Juan Román Riquelme salió un centro precioso al segundo palo, directo a la cabeza de Palermo. El “Titán” la bajó al centro del área, donde otra vez Christian Cellay la mandó al fondo de la red.
Fue final y empate 2 a 2. La última pelota que Palermo tocó en su vida como jugador profesional, fue esa asistencia a Cellay. El resultado no le alcanzó a Boca, que se quedó afuera de la Sudamericana. Gimnasia quedó condenado a un desempate ante Huracán, donde definieron quién descendía directamente y quién jugaba la Promoción (finalmente descenderían ambos). Pero la hinchada de Boca en La Plata deliraba de emoción. River había perdido y se preparaba para jugar la Promoción ante Belgrano.
