Boca vive horas de constante intranquilidad. No sólo por los problemas que surgen hacia dentro del vestuario y por los recientes malos resultados, sino también por el funcionamiento colectivo del equipo. El flojo rendimiento del equipo ante Arsenal, volvió a preocupar en el mundo Boca y el futuro de Sebastián Battaglia no parece ser en el Xeneize y todo indica que se va a ir al finalizar el torneo.
El miércoles, ante Talleres, en la final de la Copa Argentina, puede ser uno de los últimos partidos del entrenador que, sin importar el resultado, no seguirá al mando del club. Cuando llegó Battaglia para reemplazar a Russo se vieron muy rápidos los cambios e ilusionaban al hincha de Boca pero el rendimiento fue bajando partido a partido y ahora todo es preocupación.
Sin embargo, una vez disputada la final, aparecerá con más fuerza el interrogante generado alrededor de Battaglia. El ídolo del club asumió de manera interina hasta fin de año, y hasta el momento se desconoce cuál es la intención del Consejo de Fútbol: ratificarlo o no en el cargo. Aunque todo indica que no seguirá y se va a buscar a otro entrenador, según informó Gabriel Anello en Fútbol Sin Manchas.
El inconveniente con Sebastián Villa, Edwin Cardona y Carlos Zambrano, parece haber marcado un punto de inflexión en la relación de Sebastián Battaglia con el plantel de Boca. Los tres futbolistas en cuestión volvieron intoxicados a la concentración antes del choque ante Newell’s, por lo que fueron enviados al banco de suplentes.
Las últimas semanas, con malos rendimientos y por problemas puertas hacia adentro, parecen haber llevado a que el entrenador tome la drástica decisión de irse a fin de año, sea cual fuese el resultado en la final de la Copa Argentina. El ídolo asumió con el objetivo de meter al equipo en la Libertadores del próximo año y tiene dos vías para conseguirlo.