Desde su inauguración en abril de 2017, al Centro de Entrenamiento de Ezeiza siempre se lo conoció como el predio de Boca. En más de una ocasión, Juan Román Riquelme elogió sus instalaciones y dejó en claro que es “nuestra casa”. Por su parte, Antonio Barijho, uno de los pilares en la formación de juveniles, fue por más y lo bautizó con un nombre llamativo.
“Siempre lo digo: esto es un imperio. Hay que saber manejarse, hay que estar preparado para estar en el imperio. Yo al predio de Ezeiza le puse “el Imperio”, porque para mí es un imperio, algo inigualable, que sólo Boca lo tiene. Y el Templo es la Bombonera“, sostuvo el Chipi en una entrevista que brindó con el Canal de Boca.
Además, el actual técnico de la Séptima División dio detalles sobre la elección del sobrenombre: “Me gustó ponerle ‘El Imperio’ porque es tan grande Boca, tan grandísimo en todo el mundo, que para mí es un orgullo y una felicidad seguir representándolo. Es lo que siempre soñé. Y gracias a Dios puedo seguir cumpliendo sueños gracias a esta camiseta, a estos colores y al club que tanto me ha dado”.
Barijho, quien también fue multicampeón en el Xeneize de la mano de Carlos Bianchi, meses atrás había manifestado su orgullo por trabajar en el Centro de Entrenamiento azul y oro: “Tiene comedor, vestuarios, muchísimas canchas. Esto es lo que necesitaba Boca. Este predio tiene todo para que un jugador de fútbol triunfe. Es algo impresionante, de nivel europeo”.
Luego de su etapa como jugador de Boca, donde disputó 102 encuentros, convirtió 45 goles y levantó siete títulos, entre ellos dos Libertadores y una Intercontinental, el Chipi regresó al Xeneize en 2019 como formador de juveniles. Arrancó como ayudante de campo en la Cuarta División, la temporada siguiente formó dupla técnica con Jorge Martínez en Novena y hoy se encarga de la Séptima.