Los jugadores de Boca Esteban Rolón y Simón Rivero viven presentes similares y con una misión en común y es que el Director Técnico, Fernando Gago, los observe y los analice para determinar si están aptos para llevar puesta la camiseta azul y amarilla o que se les notifique que no poseen la calidad suficiente y escuchar algunas ofertas.
Según la información suministrada por el sitio especializado El Crack Deportivo, los dos futbolistas del club boquense están colgados o esa es la sensación que padecen y que no tendrían más remedio que aguardar a alguna propuesta o que se abra alguna negociación con entidades que estén interesados en sus respectivos servicios, pero que hasta el momento a las oficinas de Brandsen 805 no ha sonado el teléfono preguntando por alguno de los dos.
Está claro que el ex Colón de Santa Fe y Argentinos Juniors, entre otros, está inmerso en una situación de incertidumbre puesto que no es observado con interés por el entrenador del conjunto azul y oro y que éste sabe y es consciente que para el mercado de pases que finalizó arribaron muchos en su posición y que entendía que podía perder un espacio dentro del plantel profesional.
Por otra parte, para el juvenil que sumó minutos en otras instituciones y es un producto de la Reserva “Xeneize” hacerse un nombre propio dentro de un grupo de protagonistas le resulta más una utopía que una realidad concreta, por lo que, si no llegara a aclararse el panorama en las próximas horas, en junio con la apertura de la ventana de transferencias debido al Mundial de Clubes será una oportunidad única para emigrar.
Se verá entonces si quien jugó como mediocampista en Unión de Santa Fe el año anterior puede reencauzar su carrera en otro lado porque, por lo visto, excepto que ocurra una catarata de lesiones desafortunadas, no obtendrá lo que ansía tanto, que es demostrar que puede actuar en una entidad inmensa como lo es el cuadro de la Ribera.
