La vida deportiva de Martín Palermo está repleta de situaciones extraordinarias, entre goles memorables, récords y lesiones dentro y fuera de la cancha. Hace 25 años, precisamente un 13 de noviembre de 1999, ocurrió uno de aquellos recuerdos que quedaron grabados a fuego en la carrera del Titán.
Se disputaba el Apertura 1999, y Boca visitaba a Colón en Santa Fe por la fecha 14. Palermo fue el encargado de abrir el marcador y lo hizo con uno de sus goles más especiales: el número 100 en Primera División, Lo más increíble es que minutos antes de anotar el 1 a 0, el optimista del gol -como lo bautizó Carlos Bianchi- se había roto los ligamentos de la rodilla derecha. Por eso, luego del festejo, Palermo fue reemplazado y estuvo seis meses fuera de las canchas recuperándose de la lesión.
En lo que respecta a ese encuentro en Santa Fe, Palermo abrió el partido que luego tuvo triunfo para los de La Ribera por 2 a 1. Sin embargo, el detalle es que antes del tanto tuvo la rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, una lesión que lo dejó afuera de la cancha cerca de seis meses y que recién le permitió volver en el 2000, cuando en aquel partido Boca le ganó a River por los cuartos de final de la Copa Libertadores con un recordado tanto de él.
A pesar de que no pudo estar en el último tramo del Apertura 1999, el equipo de Carlos Bianchi hizo una gran campaña y finalizó tercero en el certamen con 41 puntos. Después de eso, el “Loco” retornó para jugar los últimos encuentros de la Copa Libertadores y ser la figura en la Copa Intercontinental ante el Real Madrid, al que le anotó los dos tantos en la final que el equipo de La Ribera le ganó por 2 a 1.
Después llegaría a los 227 tantos y quedaría entre los 10 mejores de la historia en el fútbol local y quedaría marcado a fuego por todos los hinchas del club de La Ribera.
