Hace minutos, Diego Martínez acaba de comunicar su renuncia al cargo en conferencia de prensa tras la derrota ante Belgrano de Córdoba por 2-0 en el Barrio Alberdi por la fecha 16 de la Liga Profesional. “Lo más sano es que dejemos el cargo” y “agradezco al Presidente por haber confiado en mí” fueron algunas frases que dejó el ahora ex Director Técnico de Boca.
No era un secreto a voces que este partido podía ser la última oportunidad que tenía de continuar si el resultado era satisfactorio, pero la caída más el nivel demostrado de su equipo hicieron irreversible que la decisión fuera la de seguir.
El conjunto azul y oro queda convulsionado y ahora Juan Román Riquelme y los miembros del Consejo de Fútbol tendrán que dilucidar quién será su reemplazante, mientras que Mariano Herrón se perfila para ser uno de los que se ponga el piloto de tormentas y preparar el encuentro del próximo domingo con Argentinos Juniors en La Bombonera, un estadio que, se espera, el público se manifieste y descargue toda su bronca hacia la dirigencia y los jugadores, responsables de este presente negro que está viviendo el club desde los resultados.
Lo que más llama la atención y sorprende de manera negativa es que se haya llegado a esta situación teniendo en cuenta que quedan muchos compromisos por disputar y que el “Xeneize” todavía tiene vida en la Copa Argentina, torneo en el que deberá medirse a Gimnasia y Esgrima La Plata en los cuartos de final el miércoles 23 de octubre y que está obligado a coronarse si es que desea clasificar a la Copa Libertadores del próximo año ya que por tabla anual se estaría quedando afuera del tan codiciado certamen.
Las razones de este final tan anunciado por el entrenador son varios como por ejemplo que nunca supo llegarles a sus dirigidos, que apostó a jugadores como Ignacio Miramón poniéndolo en dos clásicos en una incómoda posición dentro del campo, que su idea de juego jamás se vio reflejada desde la mala campaña que se viene realizando y que hubo refuerzos que arribaron y que tuvieron escasa participación como Tomás Belmonte.