En el Boca de Sebastián Battaglia se corrigió y mejoró varias características del juego que lo transformaron a su equipo en uno con más protagonismo, con riesgos defensivos amplios pero con más goles. Pero en los laterales hay también otro cambio en el Xeneize. No en los apellidos, pero sí en la determinación a la hora de atacar. En los últimos tres partidos, Weigandt y Fabra aportaron un gol cada uno.
Pero también desde sus ataques Boca generó más oportunidades de gol y de riesgo a favor, al defensor que volvió de Gimnasia le convirtieron dos penales. Aunque eso suponga un riesgo mayor cuando al equipo lo agarren mal parado, debido a que sus laterales van a estar en una posición más alta que la que uno esta acostumbrado a ver.
Fabra viene en ascenso. Es el dueño de ese puesto desde hace casi 6 años pero con muchos altibajos en lo futbolístico, el colombiano se desahogó cuando marcó su tanto en el empate transitorio frente a Godoy Cruz. Su 2021 quedó atravesado entre una expulsión que lo marcó frente a Santos por la Libertadores, malas actuaciones y un tema personal que lo afectó, como la muerte de su padre.
Por la otra banda, va Weigandt. Con las salidas de Jara y Buffarini, en Boca rápido pidieron el regreso anticipado del lateral que estaba a préstamo en Gimnasia para tenerlo a punto mientras se negociaba con Luis Advíncula. El Chelo hizo un tanto con Lanús pero además había convertido ante Atlético Mineiro en los octavos de la Libertadores, algo que el VAR le sacó de manera injusta.
“En este club hay que tratar de ser protagonista, a moverse, generar espacios. Los defensores tenemos que darle seguridad a los volantes y delanteros, pero también aportar lo nuestro“, reconoció Weigandt en los últimos días. Desde que Sebastián Battaglia se hizo cargo del equipo, eso quedó muy a la vista y sus laterales van al frente.