Ya pasó un año de aquel fatídico 4 de noviembre de 2023, día en el que el Fluminense le ganó a Boca en el Estadio Maracaná por 2-1 y se quedó con el ansiado título de la Copa Libertadores por primera vez en la historia del club, en un encuentro que también estuvo envuelto en una durísima polémica por los incidentes dentro y fuera del estadio con los fanáticos.
Uno de los nombres que quedará grabado, para mal, en la memoria de los hinchas Xeneizes es el de John Kennedy, joya del conjunto brasileño que marcó el segundo gol de su equipo. Tras semejante logro, todo parecía indicar que semejante compromiso iba a catapultar su carrera profesional, pero finalmente el destino le tuvo preparado un año completamente diferente.
De hecho, fue todo lo contrario. Hoy en día, el joven futbolista de 22 años no es ni siquiera tenido en cuenta como opción de recambio en el banco de suplentes del Flu. De hecho, en sus estadísticas solo se registran cuatro goles, repartidos en todas las competencias, desde aquel encuentro ante el Xeneize: uno en el Mundial de Clubes, uno en el Campeonato Carioca, uno en el Brasileirao, y el restante en la actual edición de la Libertadores. Y para empeorar estos números, su última anotación fue el 29 de mayo. Desde ese entonces, no volvió a festejar.
Para cerrar, como dato aparte, hablando de presencias en cancha, Kennedy no es titular desde el 11 de julio, y en los últimos diez encuentros de su equipo alternó entre sentarse en el banco de suplentes y ni siquiera concentrar. Llevándolo a los números en crudo, solo suma 646 minutos jugados en lo que va del campeonato brasileño (32 fechas).
Los escándalos extrafutbolísticos de John Kennedy
Todo este drástico cambio en la carrera del joven brasileño no radica solo en el bajón de rendimiento. La joya del Fluminense también protagonizó varios escándalos fuera del campo de juego, entre ellos llegando incluso a organizar una fiesta dentro de la concentración, lo que lo llevó a ser gravemente sancionado.