En la jornada de ayer, Colo-Colo recibió en condición de local a River por los cuartos de final de la Copa Libertadores en el que tuvo a Raphael Clauss como árbitro principal con una jugada polémica que despertó el enojo de los hinchas de Boca que recordaron una jugada similar que sobre su club fue medida con otra vara. Por eso, tres patadas similares, dos criterios distintos que perjudicaron a Boca en la Copa Sudamericana.
En primera instancia, por los octavos de final de la Copa Libertadores 2024, en el estadio Mario Alberto Kempes de Córdoba, Talleres recibía a River en el partido de ida con el arbitraje del colombiano Andrés Rojas quien iba a ser participe de la primera de las tres polémicas que estamos analizando en cuestión a sus similitudes en las faltas y las varas distintas con las que se midieron.
Transcurrían 80 minutos del segundo tiempo cuando el jugador de la “T” Lucas Suárez llegó tarde a la jugada con el paraguayo Adam Bareiro que el árbitro Rojas percibió como jugada sumamente peligrosa y le terminó mostrando la tarjeta roja al jugador del cuadro cordobés.
En segunda instancia, en el partido de vuelta de los dieciséis avos de final de la Copa Sudamericana, Boca viajaba a Belo Horizonte para enfrentar a Cruzeiro en Brasil con el arbitraje del colombiano Wilmar Roldán en el partido de vuelta en el que el xeneize iba con la ventaja en el global por 1 a 0.
Aunque, en los primeros instantes del encuentro cuando transcurrían apenas 9 segundos el peruano Luis Advíncula llegó a destiempo sobre un jugador de camiseta azul y el árbitro Roldán no lo dudo al igual que el VAR y le terminó mostrando sorpresivamente la roja al lateral derecho de Boca. La sorpresa fue la polémica de la patada que en esta oportunidad al ser muy temprana puede ser percibida como amarilla en la mayoría de las ocasiones.
Misma situación: otro color de tarjeta
Por otro lado, en el partido de ayer en la ciudad de Santiago de Chile Colo-Colo y River se enfrentaron por el partido de cuartos de final de la Copa Libertadores con el arbitraje del brasileño Raphael Clauss.
El mismo árbitro terminó beneficiando al millonario y perdonándole la vida al goleador colombiano Miguel Borja quien imprudentemente y similar al caso de Suárez de Talleres y Advíncula en Boca llegó tarde a la jugada y la pelota que terminó impactando en el tobillo del rival con su botín. En este caso, solo le mostró la tarjeta amarilla para el asombro y la protesta tanto de los hinchas xeneizes como del matador cordobés. Una misma patada, otro color de tarjeta.
