Siempre fue hincha de Boca. “De Zaragoza y de Boca”, cuenta. Por eso quería darse el lujo de ponerse la azul y oro. Y como buen fanático, Ander Herrera recordó se compró en su momento una camiseta “trucha” y también ligó alguna de un exjugador xeneize. Lindos momentos de la etapa en la que sólo soñaba con jugar en la Bombonera.
“Yo no quería conocer el fútbol argentino, o hacer una experiencia en el fútbol sudamericano, que desde ya respeto mucho, pero lo podía ver por televisión desde España. Yo quería jugar en Boca y en la Bombonera. En mi carrera en Europa me fue bien y quería darme este regalo. Vivir este club único en el mundo. El que se quiera igualar con Boca va a salir perdiendo porque la pasión de acá es incomparable”, arrancó contando en la entrevista con la revista oficial del club.
“Mucha gente me dijo qué bonita locura que has hecho. Yo respeto mucho al futbolista que va a ganar el último dinero a Arabia Saudita o a Estados Unidos, pero no quería terminar mi carrera sin jugar en uno de los clubes y uno de los estadios más emblemáticos del mundo. Los futboleros de verdad sienten cierta envidia”
La camiseta de Boca “trucha” que se compró y la que le regaló un exjugador
Córdoba, Ibarra, Schiavi, Arruabarrena, Battaglia, Riquelme, Palermo, Rodrigo Palacio, Pablo Ledesma y hasta Antonio Barijho son jugadores que Herrera recuerda de su etapa como hincha a la distancia. “A varios me los cruzo ahora en el predio, esos son los primeros recuerdos”, cuenta. Y explica que veía videos de la hinchada en Internet.
Como buen fanático, tiene su colección de camisetas xeneizes. “Me gustó Boca por mi padre, miraba mucho fútbol, veía los colores y me parecían muy bonitos. Una vez aquí compré una camiseta Olan trucha, pero la más vieja que tengo es una del Kily González, porque a él lo fichó mi padre y le regaló una camiseta que la tengo en mi casa de Zaragoza. No recuerdo la marca, pero tuve muchas camisetas de Boca”.
