Mientras el Boca de Fernando Gago se prepara para afrontar un partido clave de cara a las aspiraciones de todo el año 2025, llamó mucho la atención la noticia más reciente, que lejos está de estar relacionada al fútbol como tal. Lo que pasó en las últimas horas tiene que ver con Rafael Di Zeo, y un crimen que hace ya varios años que mantiene abierta una gravísima herida en el fútbol argentino.
En las últimas horas se confirmó lo que más de uno ya se imaginaba, y es que la Sala II de la Cámara de Casación Penal ratificó la absolución de Di Zeo, Cristian “Fido” De Vaux y Walter Coronel, quienes eran acusados de una causa que los involucraba en una guerra interna con la barra, allá por el 21 de julio de 2013. La misma dejó dos muertos en un enfrentamiento a balazos en la previa de un amistoso entre el Xeneize y San Lorenzo.
Este suceso fue la clara prueba para que no vuelva hasta el día de hoy el público visitante en el fútbol argentino. En aquel entonces, se disputaba un Torneo de invierno, una prueba piloto para ver si las hinchadas de nuestro país estaban listas para poder volver a convivir en un estadio, con dos parcialidades al mismo tiempo, como en todo el mundo.
Con todo esto, ahora para Di Zeo solo queda un único escollo para que pueda volver a los estadios de manera impune. Lo que resta para el jefe de la barra azul y oro es la causa judicial en su contra, iniciada en Córdoba el 30 de abril del año 2024, en donde se lo acusa de tenencia compartida de armas de fuego, un proceso en el que se vio involucrado cuando viajaba rumbo a la semifinal de la Copa de la Liga de ese año.
Con esto, la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich lo reintegró al derecho de admisión de manera perpetua. Pero, si la Justicia lo sobresee también de ese caso, Rafa podrá volver seguramente a las canchas, algo que se definirá más temprano que tarde.
