Llegar a la Primera de Boca es el sueño de muchísimos jugadores, a pesar de que no todos logran cumplir ese deseo en el club, la formación que se les da posibilita que puedan tener una trayectoria profesional en otro plantel o, bien, en otro país. Marcos Zappacosta se formó como futbolista en el cuadro de la Ribera y actualmente defiende los colores del St Josephs de Gibraltar, una pequeña península (territorio británico de ultramar) de tan solo 6.8 kilómetros cuadrados. Le tocó llegar a Brandsen 805 en edad de inferiores y compartió entrenamientos con Juan Román Riquelme y Fernando Gago durante el tercer ciclo de Carlos Bianchi.
“Yo los veía en la tele, y de repente estaba entrenando con ellos. Esas son cosas que solo un club como Boca te puede dar“, relató el arquero en diálogo con Olé. Además, contó cómo fue su llegada a la institución y cómo lo benefició para su carrera. “Boca no solo te formaba como futbolista, sino también como persona. Aprendías a mantenerte al 100% todo el tiempo“, relató.
El arquero quedó libre cuando llegó a la edad de debutar en Primera y luego pasó por Sportivo Italiano en el ascenso argentino hasta desembarcar en Gibraltar, donde militó en Mons Calpe, Glacis United, Europa FC y Bruno’s Magpies.
La Liga de Gibraltar pertenece a la UEFA desde 2013 oficialmente. El campeón puede clasificarse a la primera ronda previa de la Champions League y tanto el 2° como el 3° se meten en el mismo lugar, pero de la Conference League. Con ese panorama, hay que hacer grandes campañas para competir internacionalmente.
“En mi club actual entrenamos diez días seguidos sin descanso por los partidos. Acá no te podés relajar porque los equipos más chicos siempre dejan todo para ganarte”, explicó el portero sobre la competitividad en su torneo actual.
Si bien continúa atajando y compitiendo, tal como cuando se formó como profesional, también vive del coaching, su otra gran pasión que tiene más que ver con la vida, pero está ligada al deporte.
