En medio de la semana previa al Superclásico del fútbol argentino, en donde el Boca de Martínez se enfrentará al River de Marcelo Gallardo, también se está hablando de la continuidad de varios jugadores. Entre ellos, el caso más relevante es el de Guillermo Pol Fernández.
El volante decidió no renovar su contrato con el Xeneize y se irá libre en diciembre, con rumbo al Fortaleza de Brasil, donde se dice que ya arregló un precontrato. Esto generó un enorme debate sobre qué podría pasar con su futuro en el equipo, si debía seguir jugando o si el Consejo de Fútbol debía ‘colgarlo’.
Finalmente, la dirigencia decidió que el excapitán Xeneize siga jugando, algo que generó diversas opiniones en el Mundo Boca ya que hubo otros casos de futbolistas que pasaron por la misma situación, y al abandonar el equipo meses después, ya no vistieron más la camiseta azul y oro.
Pese a esto, hay un caso particular que le da fuerzas al actual volante del equipo de Martínez, y se trata de Eduardo Salvio. A mediados de 2022, el actual jugador de Lanús también se fue en condición de libre al no acordar una renovación, pero no fue colgado por la dirigencia y siguió jugando durante sus últimos meses en La Ribera.
Incluso, Toto Salvio se despidió de la hinchada en su último partido, anotando un gol de penal ante Unión en junio de 2022, para luego irse rumbo a México. Tanto él como Pol Fernández tienen la banca de Juan Román Riquelme, y se despedirán en cancha con su gente.
El caso opuesto a Pol Fernández y Toto Salvio en Boca
Distinto a los casos de Pol y Salvio, el presente de Nicolás Valentini es totalmente distinto. El defensor mantuvo negociaciones que no llegaron a buen puerto, lo que generó polémica y una pelea con la dirigencia y el Consejo de Fútbol, lo que lo terminó marginando de Boca y decidieron colgarlo.