Ningún debut es sencillo. Y el jugador en cuestión la tuvo doble porque su primer partido con la camiseta de Boca fue en la semana inicial de juego de la Copa Libertadores: triunfo ante The Strongest. Hablamos de Agustín Sández, quien a sus 20 años fue y puede seguir siendo de gran ayuda para el entrenador Miguel Ángel Russo.
En ese duelo, ingresó en el segundo tiempo en lugar de Agustín Obando mientras que, su primera vez como titular fue contra Santos en la Bombonera, ¡nada fácil! A nueve días de los octavos, sin Emmanuel Más y con Frank Fabra en la Selección de Colombia, si el DT lo decide, el lateral izquierdo estará resguardado por alguien que ya tiene puesta la camiseta hace rato (si bien Marcos Rojo puede jugar por ese sector, iría de central).
Agustín Sández, pieza clave de la Reserva que firmó su primer contrato profesional en septiembre de 2020, es fanático del “Xeneize”. “Llegó el día que siempre soñé, debutar en Primera con la camiseta que amo y que visto desde los 7 años. Sé que apenas es el comienzo y que hay mucho por delante, estoy muy feliz por cumplir mi sueño”, posteó en su Instagram el día de su presentación absoluta con la azul y oro.
Mide 1,81 metros, es zurdo y usa la 37. En sus redes sociales también se puede ver alguna que otra chicana a River como por ejemplo una foto disputando el torneo de Reserva en la que el futbolista comentó: “Riber 1 – 3 BOCA”. Muchas imágenes en la Bombonera y otras tantas con varios futbolistas que juegan o pasaron por Boca: Marcelo Meli, Rodri Bentancur, Fernando Gago, Cristian Pavón y obviamente, Carlos Tevez.
En tanto, Miguel Ángel Russo está buscando el once ideal y en los equipos que prueba, en el lateral izquierdo, ubica a Sández y también a Valentín Barco (16 años). Sin embargo, Agustín fue el elegido para disputar el primer amistoso de pretemporada en el once de los titulares, algo que indica que puede ser el que reemplace a Fabra en la Copa. Algo no menor para el DT a la hora de buscar soluciones. Y qué mejor que lo haga un hincha que su mayor sueño es ganar la Libertadores… ¡con todo!