Perderlo en este momento significaría un puñal y un dolor de cabeza para el cuerpo técnico, pero si así lo llegara a disponer el Consejo de Fútbol de Boca, habría que resignarse a liberar a Exequiel Zeballos y que pueda emigrar hacia Brasil para militar en Sao Paulo y que Alan Franco, defensor de uno de los gigantes de Sudamérica, se calce la camiseta azul y amarilla.
Según la información publicada en el sitio especializado El Crack Deportivo, el club boquense podría vender al extremo en 10 millones de dólares e incorporar de manera gratis al ex jugador de Independiente, a quien mantiene en el radar para reforzar la última línea tras la intervención quirúrgica a la que se sometió Nicolás Figal y que Cristian Lema no entra en los planes de Fernando Gago, pese a que ya está repuesto de una lesión en los ligamentos que sufrió en octubre del año pasado.
No obstante, el “Changuito”, hoy en día, si llegara a ser vendido no tendría sustituto, por lo que este rumor se puede cristalizar siempre y cuando el tricampeón de la Copa Libertadores acerque una propuesta jugosa desde los económico que la vuelva irresistible para las arcas del “Xeneize”.
Sin embargo, el joven punta se encuentra a dos partidos de cumplir el centenario con la casaca del cuadro de la Ribera, motivo por el cual lo tiene expectante de recibir una plaqueta que lo identifica con haber alcanzado el centenar de presencias, aunque la cuenta pendiente es levantar trofeos con el conjunto azul y oro.
Se verá entonces si esta presunta pretensión se traduce en una operación concreta y comienza a existir una conversación para así entablar una negociación que tiene dos caminos, es decir, que el Presidente, Juan Román Riquelme, la escuche o que declare al punta intransferible y no lo ceda a ningún equipo, por lo que las comunicaciones se cortarían de raíz y no prosperarían, por ende, no erogarían la cláusula de rescisión y así el futbolista continuaría ligado a Brandsen 805 para que los hinchas lo sigan disfrutando.
