La pasión que despierta el Mundo Boca a lo largo del planeta es algo que no está en discusión. Siempre aparecen futbolistas y otras personalidades lejos del ámbito deportivo que reconocen su admiración hacia los colores azul y amarillo, ya sea por una relación cercana, por haber visto al equipo en cancha, o incluso también por la locura que genera la hinchada, en un clima poco visto a lo largo del mundo futbolero.
Distintos futbolistas que han llegado a destacar en el fútbol de primer nivel mundial, también han dejado en evidencia un aprecio hacia los colores. Casos como el de Daniele De Rossi, o yendo a lo más reciente, viendo a Edinson Cavani, demuestran que La Bombonera atrae a cualquiera, incluso a las estrellas y los máximos exponentes del planeta.
Y en medio de tantas figuras que han demostrado su fanatismo por estos colores, aparece un nombre que, si bien nunca sonó para ponerse la azul y oro, lo cierto es que siempre dejó en claro su fanatismo, gracias a su familia. Se trata de Santiago Giménez, hijo de Christian, el “Chaco”, quien recientemente hizo estallar una bomba en el cierre del mercado de pases en Europa.
El delantero argentino nacionalizado mexicano pegará el salto rumbo al AC Milan, tras el acuerdo con el Feyenoord a cambio de 35 millones de euros más complementos. “Agradezco a la afición del Feyenoord, desde el primer día me dieron el apoyo“, remarcó el goleador tras su doblete ante Bayern Münich por la Champions League.
Santiago Giménez sueña con jugar en Boca
Pese a crecer en México, el paso de su padre por el club de La Ribera lo volvió un hincha más. En agosto de 2024, Santi dejó en claro que se identifica con la azul y oro: “La gente piensa que tengo que ser de Boca o de Cruz Azul. Soy de los dos. Son países diferentes“.
Seguido de eso, el delantero reveló su sueño: “Me gustaría jugar en Boca. Mi papá jugó en Boca y desde niño me inculcó esta pasión por Boca. Sería un sueño para mí“.
