El camino de Brisa Campos al estrellato está marcado por momentos únicos, pero ninguno tan emblemático como aquel día de 2017 en el Club Luján. Por entonces, Diego Armando Maradona, siempre presente en los escenarios del fútbol donde estuviera su pareja Rocío Oliva, decidió dar una mano al equipo local con su inconfundible estilo: “Yo iba de suplente y a él ya le habían hablado de mí. Me dijo que me prestaba atención, que estaba para jugar en el segundo tiempo. Antes de entrar me dijo: ‘Vas a meter un gol’. Y pasó”
En ese partido no solo anotó el gol que le había augurado Diego, sino que también recibió unas palabras que marcarían su carrera: “Sos un verdadero Rayo y te deseo lo mejor”. Ese día nació el apodo que todavía la acompaña y que resume su explosividad en la cancha.
Brisa comenzó su carrera en Deportivo Alsina, un club modesto pero que supo forjar jugadores destacados en su Chivilcoy natal. Desde sus primeros pasos, mostró un nivel técnico y una determinación que la hicieron sobresalir. Su talento la llevó a equipos como Vélez, Independiente y Racing, pero fue en Huracán donde se consolidó como una de las delanteras más letales del país.
En 2023, llegó una oportunidad única: fichar por el Birkirkara FC de Malta. Allí no solo compitió en una liga extranjera, sino que también tuvo la chance de disputar las primeras fases de la UEFA Champions League, un torneo que Brisa siempre había soñado jugar desde que era chica. Aunque su experiencia en Malta fue breve, dejó una huella imborrable al alzar un título de liga y demostrar que podía destacarse en cualquier contexto.
El salto a Boca y el sueño de la Copa Libertadores
A su regreso a la Argentina en 2024, Huracán, de un año pasado complicado en cuanto resultados, volvió a contar con Brisa para un Torneo Clausura que la tuvo como protagonista: anotó nueve goles, quedando a solo tres tantos de la máxima goleadora del certamen que fue la venezolana Kimberlyn Campos, que jugaba en San Luis y hace pocos días firmó con River. Pero su mira estaba puesta más alto…
Ahora, su llegada a Boca marca un nuevo capítulo en su carrera, y lo hace con un objetivo claro: conquistar la Copa Libertadores, que este año se jugará en nuestro país a fin de año (aún sin canchas confirmadas): “Lo que más quiere hacer una jugadora de fútbol es competir en una Champions, una Libertadores, estar en la Selección. Por suerte se me dio la Champions y voy a hacer lo mejor que pueda. Me adaptaré lo mejor posible y espero que me vaya bien”, había manifestado el Rayo tras firmar en Europa.