En las últimas horas se confirmó el interés del Galatasaray de Turquía por Jorman Campuzano. El colombiano, quien perdió el puesto con Alan Varela, no vería con malos ojos emigrar al fútbol europeo. Riquelme y compañía no pretenden soltarlo pero, si la oferta es suficiente, sería vendido. Según trascendió en los medios, el primer ofrecimiento rondaría los tres millones de dólares.
El volante, de 25 años, llegó al club en 2019 tras su paso por Deportivo Pereira y Atlético Nacional, ambos equipos de su país. Durante su estadía en Boca, disputó 62 partidos, anotó dos goles y brindó una asistencia. Además, consiguió tres títulos locales: La Supercopa de 2018, la Superliga de 2019 y la Copa de la Liga del año pasado. En todos esos torneos fue titular.
La aparición de Alan Varela, una de las mayores promesas de los juveniles de la institución, lo hizo perder consideración del entrenador. Aunque Campuzano empezó a perder terreno antes de la aparición del chico, ya que su nivel fue decayendo en los últimos meses. El colombiano no logró mantener el juego mostrado a principios de 2020 y, una vez que Varela agarró ritmo, jamás volvió a adueñarse del puesto.
Sin embargo, Jorman no es uno de los apuntados para abandonar el club. Desde el Consejo de Fútbol creen que puede ser muy útil de cara al próximo semestre. Con tantos partidos en poco tiempo, sumado a la probabilidad de casos de Coronavirus, Riquelme quiere armar un plantel extenso. Pese a eso, si llega una oferta jugosa para la dirigencia, Campuzano podría armar las valijas.
En ese puesto, además de Varela, Boca cuenta con Esteban Rolón y Diego González. Además, el juvenil Fernández, que debutó frente a Patronato, también está en los planes del cuerpo técnico. Por el lado de Miguel Ángel Russo, no pondría trabas en la operación, sabiendo que el dinero podría ser utilizado para reforzar otras zonas prioritarias para el entrenador, como el ataque y los laterales. De momento, no hay nada cerrado.