No pegaba un ojo. Norberto Briasco, el nuevo refuerzo que hoy tuvo su primer día de pretemporada bajo las órdenes de Miguel Ángel Russo, necesitaba que se concrete su llegada a Boca para dormir más tranquilo. Emoción, ansiedad, desconcierto, alegría, anécdotas y detalles sobre cómo vivió el proceso de la negociación entre Huracán y el “Xeneize”. Briasco pasó por el Canal de Boca…
“El domingo que pasó me fui a pescar con Lucas Merolla (ex compañeros en el Globo) al Río de la Plata porque no aguantaba más los nervios, quería despejarme un poco. Fuimos a pescar pejerrey, preferí apagar el celular e irme a pescar con mi mejor amigo”, comentó entre risas reconociendo que algo de pesca hubo más allá de que el objetivo era otro.
El delantero manifestó que tantos días de incertidumbre le trajeron problemas para conciliar el sueño: “Me ha costado dormir, hubo días que me despertaba a las dos o tres de la mañana. Pasé muchos nervios, esperaba que llegara el día”. Sin embargo, reconoció que el Consejo de Fútbol siempre estuvo en contacto con él y su representante para tranquilizarlo sobre que a pesar de los pormenores, su arribo al “Xeneize” se iba a concretar.
Y el tan esperado primer día llegó con una perlita: Norby, como le dicen, ingresó por la puerta equivocada. “Sinceramente había venido una vez sola acá entonces mucho no conocía. Vine jugando en reserva, amistosos y oficialmente pero en este contexto no vine nunca, es distinto”, dijo. Asimismo, reconoció que esperaba entrenarse con los compañeros, conocer al cuerpo técnico y que lo conozcan…
Briasco no ve la hora de poder presenciar lo que se siente en una Bombonera repleta. “Quiero disfrutar de la cancha llena que es una locura”, anheló aunque tendrá que esperar un poquito más. Por último, un mensaje para que ahora sea el hincha el que se quede tranquilo y sin la necesidad de ir de pesca: “Voy a dar el máximo como se merece esta gigante camiseta. Espero que me vaya bien y adaptarme lo más rápido posible a este club que debe ser lo más lindo que hay”.
