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Boca es historia

A 20 años de Boca bicampeón continental: el conflicto entre jugadores y dirigencia

En medio de la Libertadores, un conflicto cambiaría el futuro del plantel.

Boca Juniors
Fuente: Twitter: Goal Argentina.

Junio podría ser apodado el mes de las efemérides. Tras varios aniversarios de copas anteriores (con descenso de River incluido), este día 28 celebramos una de las hazañas más grandes de la institución. Una noche como la de hoy, Boca vencía a Cruz Azul y se consagraba campeón de América por segundo año consecutivo. Significaría la cuarta Libertadores del Xeneize.

En aquella edición sucedería un punto de inflexión entre los jugadores y los dirigentes, al mando de Mauricio Macri. El tesorero del club, Orlando Salvestrini, declaró previo al partido de vuelta de las semis ante Palmeiras: “Los jugadores están un poco histéricos, tendrían que ir a un psicólogo. Tal vez no quieran viajar porque le temen a algo”. La frase surgió ante la exigencia de los jugadores del pago de los premios de la Libertadores pasada.

El plantel, se cansó de esperar aquel cobro y amenazó con no viajar a Brasil para el partido de vuelta. Salvestrini avivó las llamas con aquellas declaraciones, desatando la guerra entre jugadores y dirigentes. Bermúdez y Serna fueron quienes tomaron la posta ante los medios. El central publicó un comunicado que rezaba: “…sobre las declaraciones del señor Salvestrini hacemos conocer nuestro más grande repudio”, comenzó.

Y añadió: “Dado que este plantel al que dijo le hace falta un psicólogo y además, según él, tiene miedo al fracaso, le recuerda que en tres años salió campeón tres veces de la Argentina, y también de América y del mundo. Afortunadamente, él no tuvo nada que ver con estos logros. Desde 1995 a 1998, Boca no ganó nada…” La relación se había roto definitivamente. Carlos Bianchi, por su parte, apoyaba al 100% el reclamo de sus jugadores.

La Libertadores ganada no pudo calmar las aguas. Macri se desprendió de Bermúdez, el mayor referente de aquel plantel. Con él, también se fue el DT, quien no renovó el contrato y dejó plantado al presidente Xeneize en aquella recordada conferencia de prensa. Con este clima, Boca obtuvo su segundo bicampeonato continental, cambiando para siempre la historia deportiva e institucional del club más grande de América.