“El delantero empujó a nuestro defensor con las dos manos. Todo el mundo lo puede comprobar con la grabación. No hay nada que discutir”, lanzó sin preámbulo el presidente de Atlético Mineiro refiriéndose al gol que le anularon a Boca Juniors en el partido de ida. Sin embargo, no fue a lo único que apuntó. Muchas quejas y una clara advertencia…
Sergio Batista Coelho se mostró disconforme por la manera en que su delegación fue recibida en Buenos Aires el martes pasado, disparó contra el cuerpo técnico y calentó la revancha del 20 de julio. “Arribamos al aeropuerto cerca de la medianoche, nos volvieron a hacer los testeos que ya habíamos hecho y tuvimos que esperar los resultados con mucho frío durante dos horas. Al hotel llegamos casi a las tres”, comenzó su descargo.
En esta misma línea, advirtió: “Los vamos a recibir de la misma manera que nos recibieron a nosotros”. Asimismo, comentó las complicaciones que hubo entre ambos bandos durante el duelo. “El cuerpo técnico de Boca presionó a nuestro entrenador durante todo el partido hasta con cuestiones morales”, señaló mostrándose evidentemente molesto.
Y agregó: “A nosotros nos pusieron en un rincón del estadio, con una visibilidad horrible, y eso que no había público”. Es más, no terminó ahí dado que también, según el máximo dirigente del club brasileño, los problemas continuaron luego de los noventa minutos. “Los directivos fueron detenidos por guardias de seguridad del club y tuvieron que esperar 40 minutos hasta ser liberados”, señaló.
El equipo dirigido por Miguel Ángel Russo juega hoy por la Liga local ante Unión y Atlético Mineiro se medirá mañana ante Corinthians por el Brasileirao. Sin embargo, ambos ya juegan la difícil revancha de los octavos de la Libertadores que se dará el martes que viene. “Los medios solo informaron con una clara intención de presionar. No lo aceptaremos”, cerró. ¡Hay que esperar un poquito más!
