Boca sigue a avanzando a paso firme con las obras en el club. A las refacciones en Boca Predio, el vestuario de las Gladiadoras y las remodelaciones que están encarando en el Estadio Luis Conde, más conocido como “La Bombonerita”, se le suman las modificaciones que hicieron en La Bombonera. La idea de la actual dirigencia es mejorar la infraestructura, tanto de los deportistas como de los socios que asistirán al club luego que se levanten las restricciones por la pandemia.
En la noche de ayer, con motivo del escandaloso partido ante Atlético Mineiro por la Copa Libertadores, Boca lució las últimas reformas que se le hicieron a La Bombonera. Entre las mismas, se estrenó el nuevo vestuario local, remodelado a cero y presentado por Juan Román Riquelme en un video publicado por las redes oficiales del club. Además, hicieron arreglos en las plateas media A y B.
También, se pintó de color azul y se cambiaron las butacas de toda la platea preferencial, debajo de los palcos. Yendo al vérde césped, se destaca el resembrado de todo el campo de juego y mejoras en el sistema de drenaje, que según las explicaciones del club, estaba anegado en varios sectores. La obra total de mejora para todo el campo de juego está planificada para el próximo receso, que será en diciembre. Anteriormente ya se había renovado la imagen de todo el estadio y mejorado la comodidad de los socios al quitar alambrados y rejas divisorias.
¿La Bombonera se amplía con inversiones chinas?
Más allá de estas obras, la dirigencia actual de Boca que encabeza el presidente Jorge Amor Ameal, aún quiere concretar su máximo proyecto (y promesa de campaña), que es la ampliación de La Bombonera. Aparentemente, y según algunas versiones mediáticas, estaría encaminada la resolución de un conflicto importante sobre “Bombonera 360”, que es la financiación del plan. En el club estiman que una remodelación de ese tamaño cuesta alrededor de 80 millones de dólares.
Ese dinero sería desembolsado por capitales chinos. Para aceitar las relaciones con el país oriental, la Embajada China ya tiene una oficina dentro del propio estadio. La idea del club para recibir las inversiones sería compartir por una determinada cantidad de años las ganancias de la reforma, sin afectar el patrimonio del club. La obra, en caso de llegar a un acuerdo, estaría supervisada por el propio gobierno chino, y empresas de ese país tendrían prioridad sobre publicidad en la camiseta y el “naming” del estadio.