En el último mercado de pases, la dirigencia del Club Atlético Boca Juniors, comandada por Juan Román Riquelme, realizó quizás la mejor gestión desde que el ídolo es el presidente de la institución. De cara a este 2025, el club logró la llegada de siete refuerzos: Carlos Palacios, Ayrton Costa, Rodrigo Battaglia, Alan Velasco, Ander Herrera, Williams Alarcón y Agustín Marchesín.
El ahora ex futbolista de Colo Colo, una de las grandes figuras del fútbol chileno, cumplió finalmente su deseo de desembarcar en Brandsen 805 para ponerse la camiseta del cuadro Xeneize, algo que él mismo asegura que buscaba desde chico, confesando que siempre fue simpatizante del equipo.
Pero además de eso, y de sus fotos de joven vistiendo la pilcha azul y oro, también hay otra historia aparte que pocos conocían, y que tiene que ver ni más ni menos que con la relación que mantiene el futbolista con su sobrino.
En las últimas horas se reveló una acécdota que tiene al atacante trasandino como protagonista estelar junto a su pariente, el cual fue determinante para que Carlitos tome la decisión de pasar a jugar en el fútbol argentino. Resulta que su sobrino también es un hincha apasionado del club azul y oro, por lo que también influyó en la decisión final del jugador.
“Tengo un sobrino que es argentino que es fanático de Boca. Así que ahí vivía con la presión de todos los días él me decía que viniera al club. Siempre veíamos los partidos. Íbamos al estadio cada vez que Boca jugaba en Chile”, fueron las palabras del propio Palacios en la conferencia de prensa de su presentación como refuerzo del plantel del Único Grande.
Por otra parte, también remarcó la injerencia de Juan Román Riquelme a la hora de ponerse la piel azul y amarilla. “También está Román, que es un ídolo y un referente para mí. Es una felicidad enorme y no queda nada más que ahora disfrutar el momento“, agregó el chileno que hace algunos días atrás le dedicó un saludo de feliz cumpleaños a su sobrino en Instagram.
