Boca llevó a cabo un gran mercado de pases, consiguiendo una gran cantidad de caras nuevas para el plantel dirigido por Fernando Gago. En total, hasta el momento el club concretó el arribo de siete refuerzos: Carlos Palacios, Ayrton Costa, Ander Herrera, Rodrigo Battaglia, Alan Velasco, Williams Alarcón y Agustín Marchesín. Y de hecho, ya todos se entrenan con el plantel y han tenido la oportunidad de debutar con esta camiseta.
Se sabe que, puertas adentro en el Xeneize, la idea era cerrar este libro de transferencias con broche de oro, buscando el retorno de Leandro Paredes a la institución. Sin embargo, el futbolista campeón del mundo no acordó su vuelta, por lo que permanecerá, al menos por ahora, en la Roma de Italia, y el club deberá aguardar por volver a hacer un intento en junio, previo al Mundial de Clubes.
Pero también, en medio de todo este duro trabajo a lo largo de esta ventana de traspasos, han sonado otros nombres que parecían estar realmente cerca de ponerse la camiseta azul y oro. Ese fue el caso de Valentín Gómez, hoy ex defensor central de Vélez Sarsfield, a quien Pintita soñaba con sumarlo a su plantel.
Sin embargo, la dirigencia del Fortín terminó negociando la salida de su capitán con el grupo inversor Foster Gillett. Sin embargo, los recientes problemas fiscales que afronta el grupo del magnate estadounidense, relacionados a sus fondos, hicieron que la situación con el jugador se complique. Ahora, el argentino se entrena por su cuenta en una plaza de Italia, a la espera de que se destrabe su llegada al Udinese.
De todas maneras, del lado del cuadro italiano se espera que puedan hacer el anuncio oficial de la llegada de su refuerzo en los próximos días, ya que desde Liniers autorizaron a Gómez a entrenarse con su club, a la espera de que llegue el dinero.
La cláusula “Anti Boca” de Valentín Gómez
Germán García Grova reveló que el Fortín acordó una cláusula en donde el defensor solo puede ser cedido en Argentina con destino a Liniers, evitando así su llegada a Boca.
