Gabriel Aranda fue una figura indiscutida en el Boca de reserva, llegó a primera con todas las luces y capacidad para liderar un grupo, fue el capitán de la divisional en 2021/22. Durante el año 2022, Sebastián Battaglia se la jugó por el en varias ocasiones durante su tiempo como DT del equipo superior cuando algún titular le iba en falta. De arranque su rendimiento fue muy bueno hasta de ser un posible titular fijo, pero su rendimiento fue cayendo en picada.
Durante el ciclo Ibarra y posteriormente Almirón, tuvo consideraciones de mayor a menor, y ya desde que Jorge se hizo cargo del primer equipo ya no jugó mas y el Consejo de Fútbol decidió enviarlo a cedido a Banfield con la intención de que sume minutos y experiencia.
Lamentablemente para “El Pola”, no todo salió como lo esperaba el juvenil, Julio Cesar Falcioni era en ese momento el DT del Taladro, y vio con buenos ojos incorporar al pibe a sus filas pero poco antes de debutar sufrio un desgarro que lo tuvo a maltraer hasta el final del 2023.
Ya en 2024, Aranda volvió a tener problemas físicos, mas precisamente el 30 de enero de este año y la lesión lo tendría marginado hasta marzo, pero no tuvo suerte en todo el semestre, jugo solo un partido por la Copa de la Liga y solo 1 minuto ante Independiente Rivadavia. Su carrera se relanzo recién en el segundo semestre donde jugo 395 minutos en 8 partidos por la Liga Profesional y últimamente volvió a perder terreno en el equipo que hasta hace poco dirigía Gustavo Munúa el cual tampoco pudo sacarle el jugo al zaguero central. La última vez que disputo un partido fue el 7 de octubre ante Estudiantes en el Lencho Sola y hace cuatro fechas no es ni convocado.
Gabriel Aranda ya tiene 23 años y su préstamo de 18 meses esta por finalizar, deberá regresar a Boca y ser evaluado por Fernando Gago que tampoco es que tiene muchas opciones en defensa y con la cabeza en el mercado de pases. Con muchas bajas y dudas para disputar el 2025, dependerá de El Pola demostrarle a Pintita que sus meses fuera con lesiones y lucha valieron la pena y puede serle útil a Boca en un año con muchísima competencia, ya sea nacional como internacional.