Siempre es noticia cuando un futbolista llega a uno de los cinco denominados clubes grandes del fútbol argentino, más aún si también lo hace siendo todavía joven y sorprende a todos con su juego. Y a esto se le puede sumar un condimento mayor, que es cuando es dar el gran paso de pasar a vestir la camiseta de Boca, generando quizás aún mayor repercusión en los medios.
Sin embargo, como ya varios que pasaron por el club lo han dejado más que claro, no solo es dar el salto para llegar al Xeneize, sino que también luego hay que confirmar esto y mantenerse vigente. Hay varios casos de nombres que llegaron a Brandsen 805 como grandes promesas, pero hoy son irreconocibles para el hincha actual.
Un ejemplo de esto es el de Matías Roskopf, quien llegó al club proveniente de Colón de Santa Fe con tan solo 15 años. En aquel entonces, la dirigencia decidió que siga su proceso de formación con la camiseta azul y oro. Sin embargo, años después se fue por la puerta de atrás, ya que nunca pudo afianzarse en la institución.
En una charla con BolaVip, el entrerriano contó cómo se enteró de su pase al cuadro de La Ribera: “Tengo entendido que Colón debía una deuda muy grande, que incluso estaba por desaparecer en ese momento…estábamos jugando el sudamericano sub quince en Bolivia con la Selección Argentina. En medio del campeonato nos enteramos que Colón nos había vendido a Boca“.
Una vez abandonó las filas Xeneizes en 2018, pasó por varios clubes de segunda línea como Montevideo City Torque, Rapid Bucarest de Ucrania y también un paso por la liga de Chipre. Volvió a Sudamerica para jugar en Uruguay y luego fue a México. Ahora, desde fines del año pasado quedó libre del Atlante y desde ese entonces entrena en soledad.
El nuevo destino de Roskopf
Tal como lo contó en BolaVip, tras entrenarse solo en Buenos Aires finalmente tendrá nuevo club en 2025. El ex Boca pasará a jugar en el Maricá de Brasil y disputará el Campeonato Carioca.