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Rumores en Boca

¿Se marcha? El jugador de Boca que no tiene minutos y se iría con más pena que gloria en 2025

El futbolista “Xeneize” jugó poco en el año y podría emigrar del club el próximo año

Juan Ramírez

No llegó con el cartel de jugador estrella ni de una trayectoria envidiable, sino más bien aterrizó en Boca como alguien utilitario y como una especie de actor de reparto, pero su realidad indica que piense seriamente en rever su futuro y buscar una salida decorosa para pensar en sus aspiraciones de reinventarse. Por eso, Juan Ramírez, que corrió de atrás cuando estuvo Diego Martínez de Director Técnico en Boca, verá si con el cuerpo técnico encabezado por Fernando Gago endereza su discreto presente y empieza a ser tenido en cuenta.

Pretendientes no le hacen falta porque se nombran a los rosarinos Rosario Central y Newell’s Old Boys y hasta Talleres de Córdoba que estarían interesados en contar con sus servicios. También se lo nombra a San Lorenzo para repatriarlo, pero el volante tiene contrato con el “Xeneize” hasta diciembre de 2026 y se empezarán a escuchar ofertas ni bien concluya el año.

A comienzos de este año, el ex DT de Tigre y Huracán, entre otros,  tomó las riendas del equipo y no lo tuvo en cuenta. Esto se ve reflejado en sus números, ya que solo disputó cuatro partidos esta temporada y la última vez que vio minutos fue en julio ante Independiente del Valle de Ecuador por los dieciseisavos de final de la Copa Sudamericana. Ahora, tiene la gran chance de redimirse con un nuevo conductor.

Por ello, tendrá que esmerarse para ganarse un puesto entre los once iniciales o sino hacerlo desde el banco de suplentes para reinsertarse entre los convocados pensando en el compromiso del sábado desde las 19 con el “Matador” en el José Dellaggiovana de Victoria por la fecha 18 de la Liga Profesional.

Llegado el caso de que sienta que pueda ser un estorbo para sus compañeros y ver que hay otros en mejor estado físico y futbolístico será el primero en armar las valijas e irse por la puerta de atrás con más pena que con la gloria que imaginó que pudo arribar desde el “Ciclón”.