Recién llegado al país para enfrentar a River por la revancha de los cuartos de final de la Copa Libertadores, a Jorge Almirón, ex Director Técnico de Boca, Lanús, Independiente, entre otros equipos, le consultaron en el aeropuerto de Ezeiza si había visto el Superclásico y, entre risas, respondió: “No lo pude ver el partido, estaba trabajando”. Y obviamente causó repercusión en redes. Por otro lado, también se puso serio y comenzó a palpitar el choque con el “Millonario” en el Monumental, dejando en claro sus sensaciones. “Tenemos las mejores expectativas, venimos con muchas ganas y muy ilusionados“, arrancó. Y luego fue por más.
“Venimos con un apoyo muy importante desde Santiago. Es inesperado, la gente se volcó con ilusión. Todavía no hemos ganado nada, falta el paso más duro y más importante”, sostuvo con cautela, y seguramente sueña con dar el golpe frente al elenco de Marcelo Gallardo.
Con el ánimo en alza después de una buena producción de Colo Colo de Chile en el Monumental de Santiago con el 1-1 que deja abierta la serie y con sus jugadores frescos tras un descanso en el torneo local, el equipo de Almirón se prepara de lleno para amargar una vez más al conjunto de Núñez, al que supo eliminar en 2017, cuando en las semifinales lo superó por un resultado global de 4-3 con Lanús, al que llevó a la final de la Copa Libertadores y en la que caería ante el Gremio de Porto Alegre de Brasil.
Sin Maximiliano Falcón, que vio la tarjeta roja en la ida junto al defensor del equipo argentino Paulo Díaz, el “Cacique” se prepara para hacer historia y acceder a la instancia de los cuatro mejores clubes del torneo continental desde 1997, es decir, hace 17 años que no alcanza dicha etapa.
Con un Arturo Vidal inspirado y con el delantero Carlos Palacios temperamental con sus rivales y haciéndoles sentir el rigor físico y el trajín del compromiso, en Chile respaldan y alientan a sus jugadores y cuerpo técnico y aguardan a que el batacazo sea posible
