Mientras todos los hinchas están pendientes de lo que pasará el próximo sábado, en una nueva edición del Superclásico del fútbol argentino, Juan Román Riquelme y el Consejo de Fútbol de Boca siguen trabajando a fondo en el rearmado del plantel dirigido, al menos por ahora, por Diego Martínez. Pensando en el próximo libro de transferencias, ya hay rumores a tope sobre posibles caras nuevas.
Pensando en los refuerzos que puedan llegar el próximo año, teniendo en cuenta un calendario plagado de competencias con la posibilidad de clasificar a la Copa Libertadores, y la participación confirmada en el renovado Mundial de Clubes, la dirigencia de Boca ya palpita el receso de enero para reflotar algunas negociaciones.
En medio de tantos rumores sobre algunas charlas, Riquelme tiene en la mira la posibilidad de volver a ir a buscar a Giorgian De Arrascaeta. El uruguayo es una de las debilidades del ídolo y presidente del cuadro de La Ribera, y ya ha intentado conseguir su ficha en varias ocasiones en el pasado, por lo que no es una locura pensar en que volverán a intentarlo en 2025.
En ese sentido, recientemente en El Crack Deportivo dieron detalles inéditos sobre la posibilidad de una negociación con el Flamengo. Incluso, el equipo carioca podría acceder a sentarse a charlar para dejar ir a una de sus principales figuras. Pero solo lo harán con una condición: “Flamengo está dispuesto a negociar por De Arrascaeta, con tal de que Boca libere a Miguel Merentiel“.
Esta posibilidad llama la atención, más aún teniendo en cuenta que el delantero uruguayo también está siendo seguido de cerca por las franquicias de la MLS, además de que también hubo un sondeo en el pasado desde el fútbol español. Sin embargo, desde Boca no ven con buenos ojos negociar por uno de sus goleadores.
El valor de Giorgian De Arrascaeta
En caso de seguir adelante con la negociación, Boca deberá abrir la billetera al ver que el volante charrúa mantiene una cotización que asciende hasta los 15 millones de dólares, según el sitio especializado Transfermarkt.
