En este mercado de pases regresó Marcelo Weigandt, quien tenía contrato con Gimnasia hasta fin de mes pero tanto él como el Consejo de Fútbol quisieron que ese retorno se concretara antes y así fue. Otro jugador que debe volver a Boca y presentarse a entrenar es Jan Hurtado, quien finalizó su préstamo con el Red Bull Bragantino (Brasil) y está disputando la Copa América con la Selección de Venezuela.
La idea general es que una vez que termine dicho certamen el jugador se sume a las actividades bajo las órdenes de Miguel Ángel Russo. Sin embargo, hace unos días Hurtado había dado a conocer la incertidumbre sobre su regreso. “Todavía soy jugador de Boca, pero no sé si vuelvo…”, dijo a TyC Sports.
En este contexto, la dirigencia del club de La Ribera le avisó a su representante que el delantero no estará en la consideración del entrenador para este segundo semestre. Por lo tanto, el futuro del futbolista es ser vendido o ser cedido nuevamente a préstamo. En el Red Bull Bragantino disputó 41 partidos y marcó 7 goles, pero no hizo uso de la opción de compra de su pase.
En esta misma línea, hace unos días a través de TNT Sports, se conoció que el jugador venezolano regresará del préstamo en el club brasileño pero tendría ofertas del exterior para considerar entre todas las partes interesadas. La realidad es que Jan Hurtado tiene contrato por dos temporadas más con Boca Juniors pero desde la institución se ve con buenos ojos esta posible venta o cesión para obtener un ingreso económico.
Jorman Campuzano, otro que se puede ir
Su salida está condicionada más que nada a que Boca quiere liberar uno de los cupos extranjeros y como solo tiene dos la idea sería dejar ir a algún futbolista que todavía no esté nacionalizado como es el caso del jugador colombiano. Esto se suma al descenso que hubo en su rendimiento durante este último semestre.