En su visita al Monumental, Boca venció a River por 1-0 y pasó a ocupar el primer puesto de la zona B de la Copa de la Liga. El conjunto dirigido por Sebastián Battaglia logró un nuevo objetivo y con calma, ante la desesperación del rival, se llevó los tres puntos. Agustín Rossi fue figura de un Xeneize que, en los pies del delantero colombiano, consiguió la gran victoria de la séptima jornada.
De un lateral que lanzó Frank Fabra, Sebastián Villa aprovechó el error de Leandro González Pires y, en velocidad, robó la pelota que terminó en la red protegida por Franco Armani. Entre el defensor y el arquero dudaron lo suficiente para que el delantero sentencie, con el arco libre, el resultado a los 8 minutos del segundo tiempo.
En un primer tiempo para el olvido, el equipo de la Ribera no llegó al área rival y por su parte, el millonario no solo no fue impreciso, sino que también empezó a entender que su tanto nunca llegaría. En los de amarillo, los centrales se desconocían, mientras que los laterales eran arriesgados e imprecisos. Luis Advíncula se hizo amonestar por revolear una pelota y casi se va expulsado tras una infracción sobre Julián Álvarez.
Pasado el complemento ingresó Jorge Figal por el lateral peruano y salió Darío Benedetto, que no aguanto físicamente, para que se meta Luis Vásquez. El joven de 20 años asistió al “11” para el triunfo y además se destacó por velocidad en los mano a mano. A los 58 minutos entró Óscar Romero que casi convierte el segundo de rebote.
En el área chica, desde afuera, de tiro libre o desde un corner, Rossi evitó todos los festejos posibles para los hinchas de Nuñez. El arquero Boqeunse fue imbatible. Los locales intentaron hasta el último minuto y también pasado el complemento, sin embargo, el arco de Boca nunca se abrió. Con actitud y precisión, los de Battaglia cambiaron la cara y en una tarde- noche de festejos empezaron a convertirse en candidatos al titulo.